17 . 05 . 2016
IT: pilar estratégico del negocio del Agro
Es sabido que el futuro de este sector está junto a las tecnologías, pero aún queda mucho camino por andar [...]Es sabido que el futuro de este sector está junto a las tecnologías, pero aún queda mucho camino por andar y el debate acerca de cómo incorporarlas recién comienza.
En el marco de la feria ExpoAgro 2016, realizada durante el mes de marzo, se presentó la primera comunidad de CIOs del Agro de las principales empresas del sector: Eduardo Martínez de San Miguel, Maximiliano Steffan de Advanta Seeds e Iván Cabrera de Rizobacter; junto a Gastón Cosma de Wezen Group como moderador.
Allí, los líderes compartieron problemáticas comunes a la industria agroalimentaria y debatieron acerca del cambio de paradigma del rol de IT en la agricultura. Éste se transformó en un factor determinante en la gestión y obtención de resultados y oportunidades de negocio, pero al mismo tiempo plantea múltiples desafíos.
Agro y tecnología: primer acercamiento
Sin lugar a dudas, la actividad agroindustrial es una de las más impactadas por la IT, ya que hoy existe tecnología aplicada tanto a los lugares de producción como al análisis de información que provee datos de pronósticos climáticos, rendimientos promedio, estados de suelos, entre otras cosas. Así se logran compilar volúmenes de datos impensados hace algunos años atrás, que sirven para predecir o anticipar situaciones y tomar las decisiones necesarias con antelación.
“Es difícil imaginarse nuestro sector sin el uso de la tecnología, no solo desde la evolución de la maquinaria agroindustrial, sino también desde la oferta de servicios que aportan mayor cantidad de información que antes era muy complejo obtener y ahora se encuentra disponible a un par de clics”, afirma Eduardo Martínez, gerente de Sistemas, procesos y tecnología de San Miguel (compañía multinacional con más de 60 años de experiencia en la producción y distribución internacional de cítricos frescos y procesados).
Los beneficios de su uso son variados y abarcan toda la cadena de trabajo: mejora en los rindes y costos de producción, beneficios cualitativos en la logística y en la atención al cliente final. Sin embargo, las falencias a la hora de implementarlas se hacen notar y aún queda mucho por incorporar y desarrollar.
“En cuanto a la tecnología informática de nuestro sector, si nos comparamos con otros países e industrias, podemos decir que no somos competitivos. Además, gran parte de nuestra actividad se realiza en el interior del país, donde la deuda pendiente concierne al desarrollo de infraestructura, energía y comunicaciones”, comenta Maximiliano Steffan, IT & IS Manager de Advanta Seeds (empresa global de semillas que aplica las más avanzadas técnicas de mejoramiento vegetal convencional y biotecnología agrícola).
Solo para citar algunos ejemplos, Steffan considera a los drones como la vedette de las exposiciones, y al uso del GPS en la agronomía de precisión como una solución madura. Sin embargo, no observa una incorporación masiva de estas novedades al sector. Por el contrario, asegura que sí hay una notoria inserción de herramientas y aplicaciones móviles, y de soluciones en la nube como IaaS o SaaS.
El gran desafío de su implementación
Es cierto que hoy en día, la oferta de IT para la industria del agro es muy amplia y soluciona un sinfín de problemas, pero la gran pregunta es: ¿se la aprovecha como se debe?
“Antes de adquirir una herramienta tecnológica, la compañía debe estar madura y preparada para su implementación. Muchas veces fallamos no por culpa de la herramienta, sino por no haber analizado el uso real que podemos darle dentro de la empresa. Primero debemos tener claro lo que buscamos y para qué lo buscamos”, aconseja Iván Cabrera, gerente de Sistemas de Rizobacter (compañía líder en investigación y desarrollo de productos microbiológicos aplicados al agro).
En concordancia con esto, Martínez afirma que lo importante es no dejarse enceguecer por la ciencia, ya que no tiene sentido invertir en tecnología que no genere beneficios de negocio tangibles y cuantificables. Steffan agrega que el desafío es el de integrar las nuevas tecnologías al negocio y al ecosistema informático, pero de una manera armónica, planificada y principalmente estratégica.
Todos se preguntarán cómo lograrlo y aquí es donde reside el mayor desafío en estos tiempos. “Considero que la clave es cambiar el foco del departamento de IT y llevarlo a ser un real socio del negocio. Esto quiere decir, focalizar nuestro equipo en el negocio y tercerizar lo estándar, lo que no agrega valor, como correos, servidores, etc.”, explica Cabrera.
Entonces, la estrategia de tecnología informática y el área de sistemas deben estar alineados a la estrategia de negocios de la compañía. Para Steffan, el personal de IT no puede seguir encerrado en la sala de servidores, sino que debe identificar cuáles son las áreas competitivas de la empresa y las ventajas que ésta quiere desarrollar o mantener, para enfocar y apalancar esas iniciativas con su creatividad y esfuerzo.
“En muchas empresas ya se adoptó una perspectiva más moderna que saca a IT del simple rol de servicio al cliente interno y lo coloca como motorizador de estrategias. Ya no son las grandes máquinas de la sala de servidores lo que hace valioso a IT por saberlas manejar, sino estar actualizado sobre lo que se encuentra disponible en el mercado para adoptarlo enfocándose en la clave del negocio”, agrega Steffan.
Sin embargo, una vez que se sepa administrar la Big Data y se adopten soluciones correctas tanto móviles como en la nube (sin contar la problemática básica de infraestructura y el acceso a los costos de la tecnología), la IT enfrentará otros desafíos.
“Por un lado, la inversión en tecnología compite directamente con la inversión en maquinaria o plantaciones. Por eso, para poder implementar nuevas IT sus beneficios deben ser tangibles. Además, gran cantidad de la nueva tecnología todavía es experimental o no se encuentra madura, pero hay que animarse a invertir recursos en ella con alto potencial a futuro”, concluye Martínez.
Es claro que el apoyo a la agroindustria, impulsada por la eficiencia que sólo la tecnología puede ofrecer, es fundamental para el crecimiento de la economía de nuestro país y de la región. Por ello, la empresa que mejor incorpore y utilice las herramientas de tecnología informática, seguramente sea la que logre diferenciarse.